Este enfoque nos permite identificar las causas específicas del ojo seco y diseñar un tratamiento personalizado que no solo alivia los síntomas, sino que también previene complicaciones futuras, mejorando tu calidad de vida y bienestar visual.
El ojo seco es una condición ocular común que puede estar relacionada con enfermedades oculares o sistémicas. Su causa principal suele ser un desequilibrio en la composición de la película lagrimal, lo que afecta la calidad y estabilidad de la lágrima. Existen tres tipos principales de ojo seco:
Para ofrecer soluciones personalizadas y efectivas, realizamos un estudio detallado de la superficie ocular con pruebas especializadas que nos permiten determinar el tratamiento más adecuado.
Una vez obtenidos los resultados del estudio, diseñamos un plan de tratamiento específico para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de la lágrima.
Este tratamiento, realizado en consulta, incluye:
Con este tratamiento, conseguimos restaurar el equilibrio de la película lagrimal, reduciendo los síntomas de ojo seco y mejorando el confort visual.
El ojo seco no siempre es un problema aislado; en muchos casos, puede ser un síntoma de enfermedades sistémicas subyacentes. Algunas patologías que pueden influir en la producción o estabilidad de la lágrima incluyen:
Por esta razón, en nuestro estudio del ojo seco, colaboramos con profesionales médicos para asegurar una evaluación completa. En caso de sospecha de una condición sistémica, recomendamos la derivación al especialista correspondiente para un diagnóstico más profundo.